Necoclí. Mientras que la estudiante de enfermería Luisa Romero Hoyos sería sepultada en Puerto Libertador, de donde es natural el papá; y el comerciante de vehículos que resultó linchado, Flavio Alejandro Baquero Garzón, lo sepultarán en su natal Tunja (Boyacá), la investigación por este doble asesinato dio un giro sorprendente que podría poner en jaque al sobreviviente Luis Carlos Portillo Páez.
Este monteriano, quien conducía el carro en el que las víctimas regresaban a Montería, resultó herido, pero ya está fuera de peligro y ahora tiene muchas preguntas que responderle a los investigadores del caso ocurrido en Necoclí (Antioquia).
Esta última persona habría invitado a Necoclí a su novia, porque debía hacer en ese municipio antioqueño unas vueltas de negocio y quedaron ‘atrapados’ allá en medio del paro armado del ‘Clan del Golfo’.
De regreso a Montería, en confusos hechos resultaron muertos la joven estudiante de cuarto semestre de enfermería de la Unisinú y un ciudadano que inicialmente se dijo que era un atracador que había causado la muerte de la joven y al ser señalado como responsable del crimen y de las lesiones que presentaba Luis Carlos Portillo en la cabeza y en una de sus manos con arma contundente y arma blanca, una turba aprehendió a Baquero Garzón en un potrero y lo mató a golpes.
Pero los investigadores que asumieron el caso, al analizar lo sucedido hallaron inconsistencias en la declaración de Luis Carlos Portillo que hace pensar que los hechos no ocurrieron como trató de hacerlos parecer.
Sobre el paradero del arma de fuego existe misterio, pero este medio estableció que la joven recibió tiros de una pistola 9 milímetros.
Este medio conoció de fuente judicial que los dos comerciantes se conocieron por redes sociales, cuando Flavio Alejandro Baquero Garzón ofrecía un carro por internet y desde Montería Luis Carlos Portillo se interesó en el negocio hasta que hizo que el vehículo fuera traído a Montería y lo adquirió. Pero, habría quedado con una deuda económica con Baquero Garzón, residente en Tunja.
Esto coincide con la conversación que el boyacense sostuvo la madrugada del lunes con su padre, en la que le informó que había viajado a Montería y luego a Necoclí y que regresaría el pasado lunes con el dinero, porque Luis Carlos se lo iba a cancelar.
A esa hora, los dos aparentes amigos departían acompañados por mujeres, una de ellas era Luisa Romero Hoyos, quien salió desde Montería con su novio.
La familia de este aseguró a este medio que el carro en el que salieron era de uno de los cuñados de Luis Carlos.
Sobre el arma que se accionó, ahora no se sabe a ciencia cierta quién mató a la joven en medio de un supuesto forcejeo de los dos dentro del carro donde discutieron por plata; se conoció que hubo fallas en la investigación inicial en Necoclí, debido a que no se le practicó la prueba de absorción atómica tanto al sobreviviente como al linchado. La familia de la joven pide a las autoridades que se investigue a fondo el caso, al igual que el padre de Flavio Baquero.
Este medio conoció que Luis Carlos Portillo Páez fue vinculado a esta investigación y que ha estado en el ojo de las autoridades por la presunta comisión de otros delitos.
Esto también lo han dado a conocer amigos de la universitaria, quienes a este medio indicaron que sabían parte de la vida de la persona con quien ella andaba.
Tomado de: EL MERIDIANO
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