Ella es consciente que está aprendiendo y le falta técnica, pero la difícil situación que atraviesa la llevó ofrecer sus servicios como una forma de ayudar un poco con la economía de su hogar, en el que residen tres menores de edad, hijos de su pareja sentimental.
Esta mujer con más capacitación podrá ser una excelente manicurista, pero como ella hay muchas personas que se levantan cada día a dar lo mejor de sí y no se quedan cruzadas de brazos esperando que la bendición llegue del cielo.
Como ellas muchos han empezado de abajo, lo intentaron y no se quedaron con la pregunta, ¿Cómo me habría ido si lo hubiera intentado?
Si usted la quiere apoyar, se puede comunicar al WhatsApp 3103671061
“Emprender no es tan fácil.
Que los demás crean en tu sueño tampoco es fácil.
El empezar solo requiere de mucha valentía, determinación y creer en uno mismo más que nada en el mundo”. Dijo Zuleima.
Se el primero en dejar un comentario