Pese al ‘paseo’ que le dieron al hombre hallado muerto a bala en la carretera Montería-Tierralta, en la región del Betancí, sigue en la morgue de Medicina Legal sin identificar y lo que es peor sin que se haya acercado nadie a preguntar por algún desaparecido que pudiera tratarse de esa persona asesinada entre la noche del domingo y madrugada del lunes anterior.
Lo del paseo, obedeció, a que cuando le hicieron la inspección judicial por estar del lado de Tierralta, el cadáver fue llevado a la morgue de ese municipio del Alto Sinú; pero horas más tarde por tratarse de una persona sin identificar decidieron remitir el cuerpo sin vida a Montería a ciencias forenses en el barrio Buenavista ese mismo lunes por la tarde.
Han transcurrido cinco días y a la fecha nada se sabe de la familia del hombre que permaneció tirado con tiros en la cabeza en plena vía asfaltada a lluvia y sol.
El martes corrió el rumor de que se pudiera tratar de un exmilitar y hasta a este medio hicieron llegar un nombre y una fotografía que podría tratarse de la persona asesinada, pero las autoridades lo descartaron y por eso no se publicó nada al respecto.
Inicialmente se creyó que le hombre que yacía muerto en el asfalto podría ser una víctima más de los accidentes de tránsito en esa estrecha carretera, pero con la lluvia las gotas de agua lavaron su cabeza dejando ver los orificios que presentaba y que serían impactos de arma de fuego. Ello hizo más pronunciado la pequeña corriente de sangre que emanaba la víctima y que paralizaba el tráfico por la curiosidad de quienes por allí transitaban el lunes 11 de julio.
Ese asesinato puso la cifra de homicidios en Córdoba en lo que va del año en 257 casos y aunque las autoridades no se han referido a ese hecho en particular, todo indica que es uno más de los muchos cometidos por el crimen organizado en su vendetta o ajuste de cuentas, cuyas víctimas han tenido señalamientos.
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