Benjamín Núñez el entonces comandante operativo de la Policía en el departamento de Sucre, se encontraba prófugo de la justicia desde hace un mes y según se conoció se entregó en las últimas horas en México.
La Fiscalía lo citó a diligencia de imputación por los delitos de homicidio y privación ilegal de la libertad.
En la audiencia que fracasó y donde la Fiscalía pretendía imputar cargos al coronel Núñez, las víctimas hicieron duras advertencias sobre la legalidad del procedimiento, teniendo en cuenta que el oficial permanecía prófugo de la justicia. Aseguraron que no existe trazabilidad del poder que fue conferido por el coronel a su abogado para que lo representara en el proceso penal.
El oficial, con más de 30 años de servicio en la Policía, estuvo vinculado a la institución en diferentes unidades y en su último cargo fue designado como el comandante operativo en el departamento de Sucre. Fue justamente durante su servicio y bajo su mando cuando ocurrió la masacre de los tres jóvenes que fueron capturados por la Policía.
Carlos Alberto Ibáñez, Jesús David Díaz Monterroza y José Carlos Arévalo, llegaron sin signos vitales al hospital de Sincelejo y tras un operativo que adelantó la Policía por las vías del departamento, minutos después del asesinato de un patrullero en el municipio de Sampués, en esta misma zona del país.
Se el primero en dejar un comentario