Cartagena amaneció de color gris, el ambiente de las fiestas de noviembre se apagaron. La ciudadanía está triste por el vil asesinato de Alejandra Llórente, quien fue atacada a bala por un sicario al salir de su colegio, quien también le arrebató la vida a su papá.
Alejandra, de 10 años, se abría camino en el patinaje y hacía parte del club Cadistur, tiene conmocionada a la familia de este deporte.
La menor ya no podrá seguir rodando ni intentando cruzar la meta en el primer lugar, como solía hacerlo. Las ruedas de sus patines no saldrán más a competir.
Uno de los entrenadores de Alejandra en Cadistur, aseguró que la joven una muy buena patinadora. “Siempre decía que quería ser campeona mundial, lograr muchos títulos como Jercy Puello, Andrea Cañón, Cecilia Baena y todas las grandes patinadoras que ha tenido Bolívar”.
Alejandra llegó a Cadistur hace unos cuatro años y siempre se caracterizó por su disciplina adentro y afuera de la pista.
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