Extraña plaga acaba con 50 hectáreas de ñame espino en la margen izquierda de Lorica

Una extraña plaga, que podría ser un hongo, está acabando con la producción de 50 hectáreas de ñame espino, en por lo menos 12 corregimientos del municipio de Santa Cruz de Lorica en la margen izquierda del río Sinú.

Cuando los campesinos van a sacar o arrancar el producto de la tierra, se encuentran con apenas con el cascarón o la concha. “La mayoría de las veces el ñame está completamente podrido”, expresó uno de los agricultores consultados.

El presidente de la Asociación de Juntas de Acción Comunal de la margen izquierda del río Sinú de Lorica, Óscar Llorente Quintero, dijo que el descubrimiento se realizó en la vereda Corea, en el corregimiento Candelaria. Allí se dañaron alrededor de cinco hectáreas.

Pero el dirigente y cultivador de la zona Robert Dimas, explicó que, además de Candelaria, hay afectaciones en los corregimientos San Anterito, El Rodeo, El Lazo, Manantial, Campo Alegre, El Guanábano, Las Flores, Villa Concepción, El Remolino, Los Higales y El Campano de los Indios.

En todas esas localidades la plaga ha dañado gran cantidad del tubérculo, por lo que se estima que las pérdidas pueden llegar a 50 hectáreas en esa zona de la margen izquierda del río Sinú, que es una zona agrícola y ganadera.

El mencionado dirigente reiteró que no se sabe con exactitud la plaga que causa el daño, aunque se cree que puede ser un hongo. Pero también se puede tratar de malas prácticas agrícolas, por la sequía debido al cambio climático.

La ingeniera agrónoma del ICA, Andrea Ramos Portilla, dijo que se identificaron cuatro situaciones sanitarias, entre los que se hallan hongos de suelo y de la parte aérea, perforadores del tallo y unas escamas, que son insectos muy pequeños que afectan el tubérculo.

El secretario de Desarrollo Económico y Rural de Lorica, Jorge Hernán Lázaro López, afirmó que los campesinos tienen el compromiso de adoptar las tecnologías transmitidas por las entidades competentes, como son buenas prácticas agrícolas, buena escogencia de semillas y buena preparación de suelos.

De igual forma, deben apuntarle al buen cuidado del medio ambiente, con la utilización discriminada y no con el uso indiscriminado de los pesticidas. Estos productos se aplican con frecuencia en casi toda clase de cultivos sin tener conocimientos de los daños que puede hacerle a los mismos y a la comunidad en general.

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