Una ciudadana japonesa, quien participó en el festival Corona Sunsets celebrado recientemente en Santa Marta, utilizó sus redes sociales para expresar su descontento con el evento, al que calificó como “el peor festival” al que ha asistido. La mujer señaló varios aspectos negativos que, según ella, hicieron que la experiencia fuera lamentable.
Entre las quejas más destacadas, mencionó el alto costo del agua, señalando que una botella que cuesta $1.000, alcanzaba un precio de $11.000, lo que consideró excesivo y abusivo. Además, denunció que los asistentes no soportaban el intenso calor, lo que generó un ambiente sofocante e incómodo para quienes estaban en el lugar.
Por otro lado, la ciudadana también reveló que muchos de los asistentes sufrieron intoxicaciones por la comida comercializada durante el festival. Este incidente dejó en evidencia las fallas en la organización y logística del evento, generando una ola de críticas que ha puesto en entredicho la reputación de uno de los festivales más esperados en la ciudad.
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