Un hecho muy lamentable lo que ocurrió en Norte de Santander. El asesinato del soldado Adrián Tarazona por un francotirador, presuntamente del ELN, en los límites entre El Tarra y Convención resalta la tensa situación de seguridad en la región. La operación que resultó en la muerte de cuatro guerrilleros y tres capturas parece haber intensificado la violencia en la zona.
Las Fuerzas Militares han señalado que este ataque fue en represalia por la presencia y ofensiva de las fuerzas institucionales en la región. Ahora, con el refuerzo de la seguridad y el inicio de operativos militares, se espera dar con los responsables de este hecho. La situación en esta parte del país sigue siendo compleja, con desafíos significativos en términos de seguridad y estabilidad.
Se el primero en dejar un comentario