Ni secuestro ni extorsión, muerte de empresario y de sus trabajadores sería un ajuste de cuentas

Fuente desde la Fiscalía informó que en el caso de la desaparición y muerte del ganadero y empresario Esteban Urueta Gonzáles y sus trabajadores Gerardo Marzola Coronado y Fredy Manuel Beleño, no hubo secuestro ni extorsión, y que habría obedecido exclusivamente a un burdo ajuste de cuentas por negocios y dineros turbios de dudosa procedencia por parte de sus socios y que una disputa desató la tragedia.

El gobernador de Córdoba, Erasmo Zuleta, por su parte confirmó que la búsqueda de los cadáveres se centraba en una finca de propiedad del ganadero y que lo único que él conoció por parte de quienes llevan la investigación del caso desde que la esposa denunció la desaparición, es gue habría tenido líos con una persona por la pérdida de un ganado y trató de verificar lo sucedido en el predio el pasado martes 10 de septiembre y desde ese día no se supo más de él ni de sus acompañantes.

Crecimiento

Desde que se supo quién era la persona desaparecida y su relación con la empresa CASA ROSA cuya casa matriz inició en Sincelejo en una sociedad de dos hermanas y una de ellas es la esposa de la hoy víctima, se analizó el por qué de su crecimiento económico.

La sociedad de las dos hermanas se dividió y la que creció fue la que impulsó Esteban Urueta y su esposa desde Montería. A esto se le suma los negocios de tierra y ganado que él manejaba y cuya fortuna creció como espuma y ahora con su tortura y muerte deja más preguntas que respuestas.

La fuente confirmó que la información que se tuvo desde un principio fue que a los tres los asesinaron, pero antes habrían sido torturados e incinerados. E incluso, se pidió apoyo desde Bogotá porque los cuerpos habrían quedado irreconocibles y que fueron enterrados.

Salta la pregunta. Por qué una tortura a alguien, si esa práctica criminal se hace es cuando se busca sacar información a la víctima, o una venganza por algo cometido; o cuando se quiere mandar un mensaje macabro para sembrar terror en una zona.

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