Una incontrolable plaga de ratones, considerada como una de las peores en las últimas décadas en Córdoba, está arrasando desde hace semanas cultivos y ha llevado al límite a los agricultores de Lorica, que aún no levantan cabeza después de sufrir inundaciones y ahora sequías en sus tierras.
Por lo menos 50 hectáreas sembradas de fríjol, patilla y maíz, de igual número de agricultores de la vereda El Rodeito, corregimiento Los Monos, municipio de Lorica, han sido devoradas por manadas de ratones que abundan en esa zona de la Ciénaga Grande del Bajo Sinú.
Ese hecho comenzó a registrarse en el presente mes de febrero cuando los cultivos de fríjol y de patilla comenzaron a producir y los campesinos esperaban obtener una buena ganancia, tanto del grano como de la deliciosa fruta, pero todo se vino abajo con la aparición de mencionada plaga.
Los pequeños parceleros dicen que esta situación se registra por primera vez en esa jurisdicción, lo que los tiene bastante preocupados por las pérdidas, puestos ahí invirtieron los ahorritos que tenían, mientras que otros tuvieron que prestar plata al 10 por ciento para poder cosechar.
Los habitantes del sector acostumbran todos los años, en la temporada seca, cuando bajan las aguas del humedal, a sembrar estos cultivos para luego recogerlos y venderlos, con el fin de tener algunos recursos para el sustento de sus familias.
En el lugar también cultivan maíz, el cual estaba recién sembrado, pero de igual manera ha sido afectado por los roedores, aunque en menor cantidad, ya que la proporción de este cereal es mínima con relación a los otros cultivos.
Explican que los ratones aparecieron y empezaron a comerse las flores y las cubiertas o ‘vainas’ donde van protegidas las semillas de este cereal, conocido como fríjol cabecita negra, el cual es bastante aprecia
Henry Negrete Cantero, un veterano cultivador de patillas no sale del asombro por la cantidad de ratones que han aparecido en esos un lugares. Algunos les llaman ratón cienaguero, pero otros les dicen ratón tierrero.
“Sembramos 2.200 matas de patilla, entre cinco socios. En ellas invertimos 5 millones de pesos. Pero los ratones han dañado como el 70 por ciento de la fruta. O sea que apenas nos ha quedado un 30 por ciento, que no alcanza para nada”, expresa con dolor el labriego.
Una hectárea de patilla puede producir una renta de 16 millones de pesos, ya que es una fruta hidratante bastante apetecida para refrescar el cuerpo, sobre todo en tiempos de temperatura caliente.
Negrete Cantero está bastante preocupado porque él pensaba mejorar un poco la situación, si le iba bien con el cultivo de patillas. “Ahora que le voy a dar de comer a mis hijos si casi toda la cosecha se perdió”, puntualiza con tristeza.
La Alcaldía de Lorica, a través de la Secretaría de Desarrollo Económico y Agroindustrial a cargo de Jaider Torralvo, dijo que este jueves 24 de febrero de 2022, una comisión hará una visita técnica al lugar de los hechos.
Lo más seguro es que los funcionarios estarán elaborando un censo sobre la cantidad de hectáreas de cultivos perdidos, las inversiones y la cifra de campesinos afectados. Así lo han hecho en las zonas plataneras y de ñamicultores, donde los ratones, también han hecho de las suyas.
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