El cadáver fue abandonado dentro de un apartamento, en el cual había varios implementos para la práctica de procedimientos estéticos.
Con el sueño de mejorar su apariencia física, Ada Evelyn Ardila Pérez, de 38 años, acabó en manos de quienes serían unos falsos cirujanos que le hicieron una intervención estética en un edificio del centro de Medellín. Cuando vieron que el procedimiento estaba fallando, optaron por llamar una ambulancia y escapar en un vehículo particular, dejando el cadáver de esta mujer abandonado, con el abdomen abierto.
Los hechos se registraron a las 7:30 de la noche de este lunes en la calle 53 con la carrera 43 (Girardot), en el segundo piso del edificio San Ignacio, en el que hay oficinas y algunas residencias, aunque no contarían con el espacio adecuado para realizar esta clase de intervenciones. De hecho, según la descripción de las autoridades, solo funcionaría una camilla que no tendría las condiciones adecuadas para operar.
Allegados de Ada Evelyn indicaron que la liposucción que se iba a hacer inició sobre las 5:30 de la tarde y apenas pasaron 10 minutos del inicio, la mujer comenzó a gritar de manera constante, hasta que a las 6:45 de la tarde, después de varios minutos en los que no se escuchaba nada,vieron salir a los dos supuestos cirujanos y a una mujer, que haría el papel de enfermera.
En ese momento los familiares los interceptaron y uno de ellos señaló que se estaba poniendo delicado de salud y que iban a llamar una ambulancia para llevarla a un centro asistencial de mayor complejidad. Después de eso, los tres se fueron hacia el parqueadero y abordaron un vehículo para escapar y cuando los parientes ingresaron, se encontraron a la mujer convulsionando.
Cuando llegó la ambulancia que estas personas solicitaron, los auxiliares de Atención Prehospitalaria (APH) llegaron a esta clínica clandestina para verificar el estado de salud de la paciente y se encontraron con que no tenía signos vitales y le dejaron el abdomen abierto, sin ninguna medida de asepsia mínima para estas intervenciones.
Los agentes de la Sijín de la Policía Metropolitana realizaron las labores judiciales y dejaron por establecer la muerte de esta mujer, oriunda de Planeta Rica, Córdoba, residente del barrio Castilla, de Medellín, y quien era ama de casa. Allí encontraron cuatro equipos médicos, una cédula de ciudadanía, una licencia de conducción y un carné de la Asociación Colombiana de Medicina y Cirugía Estética.
Con base en los rasgos físicos de las tres personas que realizaron esta intervención, los investigadores ya avanzan en la búsqueda de las personas encargadas de esta muerte para procesarlos por las irregularidades encontradas dentro de este consultorio, que podría ser catalogado como una “clínica de garaje”.
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El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, lamentó lo ocurrido con esta mujer y manifestó que “nuevamente se están conociendo otra vez esos casos de mujeres que fallecen en centros asistenciales piratas, por decirlo así, por cuenta de cirugías estéticas. Ya con la Secretaría de Salud y en articulación tanto con la Alcaldía y Gobernación, estamos haciendo los respectivos controles porque no podemos permitir justamente que vuelvan a aparecer esas llamadas clínicas de garaje”.
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