El aberrante caso tuvo lugar en el municipio de Marialabaja. La menor guardó silencio por amenazas de su padre para que no le contara a nadie.
La Policía Nacional en Bolívar a través de la Seccional de investigación criminal, lograron en las últimas horas, la captura en el barrio Chumbum de Marialabaja de un hombre de 53 años de edad por los delitos de acceso carnal violento agravado y acceso carnal abusivo con menor de 14 años. Hechos ocurridos en dicha población.
Durante los años 2020 y 2021, este presunto agresor sexual, habría sometido a su propia hija a todo tipo de vejámenes sexuales. Silencio que la menor guardó en ese entonces, cuando tenía 13 años de edad, por miedo a las amenazas que su padre le hacía.
Durante ese año de abuso, la menor resultó embarazada de su propio papá, situación que obligó a decirle a su hija que dijera que el hijo era de su pareja sentimental. La menor calló su estado, pero los meses pasaban y un familiar notó su barriga crecida de manera anormal, por lo que decidió hacerle una prueba de embarazo cacera dando positiva.
Debido a la edad de la menor, ésta fue llevada a un hogar de paso con acompañamiento de la Comisaría de Familia, sin embargo, cuando la menor finalmente da a luz, se le hizo una prueba de paternidad a la bebé y a la pareja sentimental de ella, dando negativa en compatibilidad.
Fue así como la menor se vio en la obligación de contar la realidad de la situación, confirmando que el papá de su hijo era su padre, quien abusaba de ella sexualmente.
Fue allí cuando la seccional de Investigación Criminal Sijín comenzó las investigaciones pertinentes, para tener material probatorio y así solicitar a la Fiscalía una orden de captura contra este presunto agresor sexual. Logrando la orden judicial y en medio de un operativo donde se logró identificar y ubicar a este sujeto, se hizo efectiva la orden capturándolo en las últimas horas.
Actualmente la menor abusada tiene 15 años y su hija 18 meses de nacida. Ambas viven con la mamá de la menor en Marialabaja.
El victimario fue dejado a disposición de la Fiscalía General de la Nación donde un juez de la República le dictó medida de aseguramiento en centro carcelario.
Al respecto, el coronel Alejandro Reyes Ramírez, dijo “Hago un llamado a la ciudadanía, para que fortalezcan los canales de comunicación familiar, pues los niños que son víctimas de estos aberrantes delitos, en muchos de los casos guardan silencio, lo cual le genera una afectación física y psicológica que requiere de una atención especializada. El llamado es a poner el caso inmediatamente en conocimiento a las autoridades, a las líneas de emergencia 141 del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar y al 123 de la Policía Nacional”.
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