Un interno de la Cárcel de Ternera fue asesinado al sacarle los ojos, contarle la lengua y extraerle los dientes, según dieron a conocer sus familiares.
La víctima de este cruel e inhumano ataque fue identificada como Eduardo Luis Castro Vallejo, de 30 años, de Cartagena.
Esta persona fue remitida a un centro asistencial porque supuestamente había ingerido una sobredosis de sustancia estupefaciente.
En principio algunos de sus familiares pensaron que había muerto por una tuberculosis, pero posteriormente en la funeraria les dijeron que según el certificado de Medicina Legal, su muerte fue de forma violenta, cosa que hasta ese momento desconocían y no les había sido informado por funcionarios del penal.
Eduardo, quien residía en el barrio Olaya Herrera sector Playa Blanca, estaba sindicado de hurto y porte ilegal de armas de fuego. Tenía dos meses en la cárcel.
Conocidos dijeron que además de las heridas tenía golpes y que pese a la gravedad de lo ocurrido, nadie en el patio donde estaba recluido denunciara este caso de maltrato y violencia.
Hasta el momento no se conoce ningún pronunciamiento de las directivas de la cárcel y deja en evidencia las condiciones en las que viven muchos de los internos.
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