Dos buses que transportaban a los contratistas de la central de hidroituango fueron incinerados en la noche de ayer en el corregimiento del Valle de Toledo, Antioquia. El hecho se le atribuye a las disidencias de las FARC, que operan en la zona.
Según informó Empresas Públicas de Medellín (EPM), los dos vehículos estaban estacionados cerca al casco urbano del corregimiento, cuando fueron abordados por varios sujetos armados que les rociaron gasolina y les prendieron fuego. Algunos habitantes del sector grabaron el momento en que los buses eran consumidos por las llamas y lo compartieron en las redes sociales.
Tras el ataque, las autoridades reportaron que no hubo personas lesionadas ni afectaciones a la infraestructura relacionada con la obra. Sin embargo, se generó zozobra entre los habitantes y los trabajadores de la central de hidroituango.
Personal de la Policía y del Ejército se desplazaron al lugar para establecer las causas del hecho y dar con los responsables. Según fuentes oficiales, el hecho sería una acción de retaliación de las disidencias de las FARC, que estarían inconformes con el avance de la obra y con la presencia de la fuerza pública en el territorio.
La central de hidroituango es el proyecto hidroeléctrico más grande del país, que busca generar energía limpia y renovable para millones de colombianos. Sin embargo, ha enfrentado varios obstáculos y dificultades desde su inicio, como la emergencia ambiental ocurrida en 2018, las amenazas a sus trabajadores y contratistas, y los ataques a su infraestructura.
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