La República Democrática del Congo (RDC) está atravesando una crisis sin precedentes debido al aumento dramático de contagios y muertes por mpox, conocido como viruela del mono.
El ministro de Sanidad, Samuel-Roger Kamba, confirmó el lunes que el número de casos ha ascendido a 16.700, con un incremento reciente en los fallecimientos, que ahora superan las 570 muertes. Mientras que en todo el continente africano supera los 18.000 casos. Este alarmante aumento se ha registrado en cuestión de días, reflejando una situación de emergencia que ha captado la atención de la comunidad internacional.
“Estamos hablando de una emergencia continental”, declaró Kamba en una conferencia de prensa. El ministro expresó su esperanza de que las vacunas lleguen al país en la próxima semana, un paso crucial en la lucha contra esta enfermedad emergente.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado al mpox como una emergencia de salud pública internacional, subrayando el riesgo que representa no solo para RDC sino también para los países vecinos. La OMS ha instado a la implementación urgente de programas de vacunación en los territorios afectados para frenar la propagación de la enfermedad.
En respuesta a la crisis, Estados Unidos ha prometido enviar 50.000 dosis de vacunas a RDC, mientras que Japón ha acordado enviar 3,5 millones de dosis, destinadas exclusivamente a niños. Este apoyo internacional es fundamental para controlar el brote en un país que ya lucha con desafíos significativos en su sistema de salud.
“La vacuna es una solución a nuestros problemas”, afirmó Kamba. El ministro destacó que el país ha preparado un plan estratégico de vacunación y está a la espera de la llegada de las dosis para comenzar la campaña. Con 26 provincias afectadas y una población de aproximadamente 100 millones, la situación en RDC es crítica.
El mpox, descubierto en humanos por primera vez en 1970 en lo que hoy es RDC, ha evolucionado con la aparición de una nueva cepa más contagiosa y peligrosa conocida como clado 1b.
Este año, se han reportado un total de 18.737 casos confirmados o sospechosos de mpox en África, con 1.200 de estos casos registrados en la última semana. La agencia de Salud de la Unión Africana también ha informado de 541 muertes relacionadas con la enfermedad en 12 países del continente. A nivel global, el mpox ha comenzado a aparecer fuera de África, con el primer caso reportado en Suecia la semana pasada.
A pesar de la preocupación, Hans Kluge, director para Europa de la OMS, aseguró que “ya sabemos mucho sobre el mpox”, y enfatizó que, aunque la enfermedad es grave, no debe ser comparada con el COVID-19. “El mpox no es el nuevo covid”, afirmó Kluge, señalando que mientras que el clado II del mpox originó la epidemia de 2022, el clado I es el que actualmente está causando estragos en África Central y Oriental.
El creciente número de casos y el impacto devastador en RDC han llevado a una respuesta internacional urgente. Los esfuerzos de vacunación y la coordinación global son esenciales para controlar el brote y proteger a las comunidades afectadas. Se espera que el envío de vacunas a África ayude a mitigar la crisis.
Se el primero en dejar un comentario