La fuerza pública Esmad realizó un operativo de desalojo en la madrugada de este domingo en el que según los habitantes de la invasión de Comfacor, ubicada en la margen izquierda de Montería, se cometieron abusos y violaciones a los derechos humanos.
Los afectados aseguran que el Esmad llegó al lugar a las 3 de la mañana y procedió a sacar a las personas a la fuerza, sin respetar la situación de vulnerabilidad de muchos de ellos, como una señora de la tercera edad que padece de cáncer y a la que le quemaron su casita de madera.
Además, denuncian que hubo maltrato físico y verbal hacia los hombres, a quienes sacaban esposados y les impedían rescatar sus pertenencias de las llamas. Algunos de ellos resultaron heridos por las quemaduras y los golpes.
Los invasores afirman que ocupan el terreno desde hace más de dos años y que tienen una notificación con el logo de la Agencia Nacional de Tierras que les da el derecho a permanecer allí1. Sin embargo, la directora administrativa de Comfacor, Amanda Coral, ha reiterado que se trata de un predio privado que no está en proceso de enajenación y que pertenece al patrimonio de la entidad2.
La situación ha generado una crisis humanitaria y social en la zona, donde más de 3.000 personas, incluyendo extranjeros, se encuentran en riesgo de quedar en la calle. Los habitantes de la invasión de Comfacor piden a las autoridades locales y departamentales que intervengan para garantizar sus derechos y buscar una solución pacífica al conflicto.
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