La lluvia, la sangre de los toros que estaban en la arena se mezcló con la sangre de los humanos, formando un grotesco charco de muerte en el que se refleja la historia de un arte cruel que hoy en día en pleno siglo XXI sigue resistiéndose a desaparecer.
Todo fue confusión, los que estaban abajo fueron aplastados, y los otros luchaban para escapar a la muerte.
Así se recuerda aquella tarde de toros del 20 de enero de 1980, una estruendosa y sangrienta corraleja en Sincelejo, tragedia histórica que dejó una escalofriante cifra que supera los 500 muertos y más de un millar de heridos.
La tarde de toros la ofrecía Arturo Cumplido Sierra, una de las mejores ganaderías de la región.
Para ese entonces eran pocas las atracciones que podía ofrecer una ciudad como Sincelejo, por lo que las corralejas resultaban ser uno de los acontecimientos más grandes y tradicionales que convocaban a propios y extraños.
Las estructuras hechas con palo y tabla se elevaban en un redondel de tres plantas con capacidad para 10 mil personas de las cuales 500 no vieron llegar el final de la tarde por causa de la tragedia.
La Lluvia, una falla geológica e incluso tablas mal ensambladas pudieron ser el detonante del trágico suceso que enlutó a centenares de familias y que hoy nuevamente es recordado luego de la tragedia ocurrida durante la tarde de este domingo -26 de junio- en la que perdieron la vida cuatro personas y más de 300 resultaron heridas, por cuenta del desplome de ocho graderías, también llamados palcos, en la plaza de toros Gilberto Charry, en el Espinal Tolima.
De acuerdo con las autoridades y testigos, los hechos ocurrieron sobre la 1 de la tarde, cuando los asistentes esperaban la salida del segundo toro de la tarde, para continuar la corraleja que se estaba llevando a cabo en el marco de las fiestas de San Pedro, que comenzaron el pasado 24 de junio.
El alcalde de El Espinal, Juan Carlos Tamayo, aseguró que la rápida reacción de las autoridades y el apoyo de cuerpos de salud de otros municipios como Ibagué, Dolores, Girardot, El Guamo y Melgar; permitieron que esta tragedia no pasara a mayores y que las personas afectadas fueran atendidas con rapidez.
Por ello y a través de su cuenta de Twitter, el presidente electo, Gustavo Petro solicitó a las alcaldías suspender las corralejas.
“Espero que todas las personas afectadas por el derrumbe de la plaza de El Espinal puedan salir airosas de sus heridas. Esto ya había sucedido antes en Sincelejo. Le solicito a las alcaldías no autorizar más espectáculos con la muerte de personas o animales “, trinó el jefe de Estado electo.
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