Pese a las evidencias las diez personas capturadas por el delito de tráfico de fauna silvestre y maltrato animal en la vereda Altos de Polonia en Buenavista, Córdoba, fueron dejadas en libertad al ser presentadas ante un juez de control de garantías.
Solo uno de ellos, identificado como Javier Alejandro Morales Solano, fue cobijado con detención domiciliaria.
Esta decisión no cayó bien entre opinión pública y fundaciones animalistas el departamento, dado que los animales rescatados en el operativo de las autoridades presentaban evidentes signos de maltrato y tortura.
La Fiscalía reconoce que la actividad ilícita del tráfico de fauna silvestre en la vereda Altos de Polonia, jurisdicción de Buenavista, Córdoba, data desde hace aproximadamente 50 años y varias familias se lucran de ella, incluso abastecen de especies de fauna traficada a otras ciudades del país.
Pese a los esfuerzos por erradicar este delito que mueve millonarias ganancias, con este tipo de medidas tan laxas por parte de la justicia, se convierte en una tarea compleja para la Fuerza Pública.
Animales sometidos a tortura
La Fiscalía reveló que las personas capturadas sometían a maltratos a los animales que tenían cautivos, entre ellos aves, primates y felinos. “Las bañaban con agua fría, logrando someterlas. En el caso de las aves les amarraban las patas con cuerdas y a los mamíferos los atacaban con cadenas y lazos”, señaló el ente investigador.
Agregan que incluso encontraron aves cuyo plumaje fue despigmentado utilizando sustancias químicas, para hacerlas parecer especiales ante los ojos de los compradores de fauna nativa.
Aunque las imágenes de este caso de crueldad contra los animales le están dando la vuelta al país, en este caso la justicia cojeó y la mayoría de los implicados no tendrán castigo.
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