A tono con las festividades de fin de año, con ritmo de porro y posterior a una eucaristía, fue inaugurada una de las obras más significativas del gobierno actual del municipio de Cereté, el puente sobre el caño Bugre en la vereda El Zapal, en el corregimiento de Rabolargo.
Este puente que llevará por nombre “Nuestra Señora de Luján”, patrona de la vereda, es desde este momento unas de las formas de comunicación vial de diversas comunidades ubicadas al lado y lado del afluente, transformando décadas de promesas no cumplidas en evance y sueños realizados para mejorar la vida de la gente que vive del campo en esas localidades.
“Pasaron 30 años para que se volviera a ver la construcción de un puente vehicular doble carril, el último fue el puente del centro construido por el alcalde Abraham Saker, hoy nosotros, pese a la pandemia y a todas las dificultades le dejamos a los cereteanos tres puentes, entre ellos el del Zapal, los otros dos en Mateo Gómez y Retiro de los Indios”, destacó el alcalde Toño Rhenals.
Adicional al puente, que cuenta con iluminación led en base a energía solar, en el corregimiento de Rabolargo se logró realizar la pavimentación de 19,7 kilómetros de vías, además de un parque sacúdete en Las Marcelitas y obras de iluminación complementarias para la seguridad de los habitantes.
En su recorrido por las obras diseñadas, financiadas y ejecutadas por el gobierno liderado por Rhenals Otero, mañana viernes estará entregando el puente del corregimiento de Mateo Gómez y el sábado el puente del Retiro de los Indios.
Las grandes obras a Cereté llegaron de la mano del alcalde Toño Rhenals, impactando en gran medida las zonas más olvidadas del municipio.
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