El pasado lunes 29 de abril, una tragedia sacudió a la ciudad de Bogotá. Un joven paramédico, identificado como Michael Andrés Bogotá, perdió la vida mientras atendía un accidente de tránsito en la Avenida Guayacanes12.
Michael, nacido el 11 de diciembre de 2001, era un apasionado de las motos de alto cilindraje y estudiante de tercer semestre de Ingeniería Mecánica en la Universidad Santo Tomás3. Hace apenas tres meses, había decidido tomar un curso para desempeñarse como paramédico3.
Esa fatídica noche, Michael y su compañero, Stiven Rojas, respondían a un llamado de emergencia. Al llegar al lugar, se encontraron con un siniestro vial que involucraba a otra ambulancia y una motocicleta2. Mientras atendían a las víctimas, un camión de color rojo, aparentemente a alta velocidad, embistió a Michael2.
El impacto fue captado por una cámara de la ambulancia y ha causado gran consternación entre sus colegas y la comunidad en general4. Según Stiven Rojas, el conductor del camión mostraba signos de estar bajo la influencia del alcohol2.
La familia y amigos de Michael claman justicia y piden a las autoridades que el responsable responda por sus actos13. Mientras tanto, la ciudad de Bogotá llora la pérdida de este joven paramédico, cuyo único objetivo esa noche era ayudar a quienes lo necesitaban3.
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