En atentado matan a policía y a comerciante en Colosó Sucre


El patrullero Fabián Berrío Mercado y el comerciante Luis Perna Álvarez, cariñosamente conocido por sus amistades como el Gato, son las dos víctimas mortales que dejó el plan pistola perpetrado la tarde de ayer a la entrada de Colosó, justo al lado del cementerio.


De acuerdo a la información conocida, el uniformado, junto a un compañero, se encontraba en un puesto de control en el punto antes indicado. Por ahí pasó Luis Perna, que se movilizaba en un campero, de inmediato los agentes le metieron la mano, para una requisa de rutina y verificación de antecedentes.

Luis bajó de su carro, lo requisaron y luego le pidieron los documentos del vehículo, los cuales no tenía en físico, sino en fotos en el celular, después de verificar de que todo estaba bien, Berrío Mercado subió a la motocicleta para salir del lugar, pero cuando su compañero iba a subirse (como parillero), son atacados a bala por la parte de atrás del carro que requisaban. Berrío se fue al suelo, su compañero intentó refugiarse en el lado derecho del carro, pero fue sorprendido por otro sujeto que con una pistola disparaba desde una esquina del cementerio, es decir, los emboscaron, de lado y lado les dispararon.


El agente siguió disparando a las dos direcciones, hasta que los matones se dieron a la huida, mientras que el cuerpo sin vida Luis quedó frente a la puerta izquierda de su carro y el patrullero Berrío tendido en la parte derecha trasera del carro, a un lado de la vía. En un video aficionado se observa cuando vecinos de la zona llegan al sitio, han pasado pocos minutos y se pueden ver a los dos cuerpos tendidos, también cuando el patrullero sobreviviente dice que los atacaron por detrás y delante.
La comunidad toma al agente, lo cargan en brazos y lo llevan hasta el platón de una camioneta de la Policía, que lo traslada al centro de salud local, ubicado a pocos metros, pero ya no había nada que hacer.

El patrullero era natural de Berrugas, San Onofre, mientras que el comerciante residía en el barrio Los Laureles, en Sincelejo.

Con el pasar de los minutos más curiosos llegaron a al escena, así también como infantes de Marina y el comandante de la Policía en Sucre, coronel Carlos Correa Rodríguez. El Meridiano, que estuvo en el lugar de los hechos y dialogó con la comunidad, pudo percibir la tensión en sus habitantes, pues, desde las épocas del conflicto armado en Montes de María, su territorio no era escenario de un doble crimen.

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