El cochero y la operaria responsables de la estafa millonaria a turista en Cartagena fueron identificados y están en investigación.
Las autoridades de Cartagena lograron identificar a los presuntos responsables de una estafa millonaria perpetrada contra una turista canadiense en el Centro Histórico de la Heroica. Gracias a las denuncias presentadas por la víctima, estafada en un paseo en coche por la Ciudad Colonial, la Policía ha señalado al cochero y a la operaria del datáfono involucrados en el suceso.
“Yo fui el que le hice el recorrido a la turista canadiense”, dice el conducto de la carroza, que procede a dar su versión de los hechos. En esta cuenta que durante el recorrido la mujer extranjera le informó que no tenía dinero en efectivo para pagarle; “entonces yo le dije a la muchacha que maneja el datáfono que cobrara”.
Según el cochero Iván González, al día siguiente, cuando retomó su jornada laboral un compañero le mostró el dinero que le habían dejado: un millón de pesos. “Yo vi eso y me lo guardé”. Minutos después, cuenta el implicado, otro compañero le informa que lo está buscando la Policía. Es entonces cuando él se acerca a las autoridades, que lo llevan a la estación.
Según el hombre, de los 4.500 dólares que le debitaron a la mujer (lo que corresponde a casi 18 millones de pesos), solo recibió un millón; equivalente poco más de trescientos. El resto del dinero, dice, se lo habría quedado la operaria del datáfono. “Ahí yo devolví el excedente y cobré mi recorrido, cogí lo que me correspondía”. El hombre afirmó que el paseo fue acordado originalmente por un valor de 180 mil pesos, pero que finalmente se quedó con 100 mil pesos.
El implicado ofreció disculpas públicas a la turista identificada como Can Li Yu Chen: “Es la primera vez en los 15 años que llevo manejando coches que me pasa esto… Ni la asociación cartagenera de cocheros, ni yo, tenemos culpa”, concluyó el hombre.
La turista canadiense relató que entregó cuatro tarjetas al conductor del carruaje para realizar el pago, pero fue informada de que las transacciones no se habían realizado. Sin embargo, días después, se percató de tres transacciones bancarias que sumaban un total aproximado de 18 millones de pesos colombianos.
Según la versión de Can Li Yu Chen el hombre que condujo el coche fue quien le propuso que se dirigieran al Parque Fernández de Madrid para que allí una amiga de él pudiera recibir el pago con tarjeta. Tan pronto la mujer pasó la primera tarjeta, le pusieron varias excusas con el propósito de que tuviera que hacer nuevamente la transacción.
La Secretaría del Interior de la ciudad informó que la mujer responsable de la operación del datáfono ya ha sido identificada, y la turista canadiense ha recibido los primeros seis millones de pesos como parte del proceso de recuperación de su dinero.
“Hay un compromiso de las personas que están involucradas en la devolución del dinero al turista, y seguimos investigando el hecho con Policía, Sijín, y todos los entes que sean necesario”, sostuvo Cesareo Buj Hernández, el secretario de esta entidad municipal.
Más denuncias de estafas en Cartagena
En medio de la temporada de fin de año, las denuncias de estafas a turistas en Cartagena se han multiplicado a través de las redes sociales, generando preocupación entre los visitantes que eligen esta emblemática ciudad colombiana como destino. En coincidencia con el caso de la turista canadiense, otra denuncia ha ganado notoriedad, revelando un patrón de fraudes dirigidos a los visitantes.
En esta ocasión, un ciudadano expuso en redes sociales que fue víctima de cobros indebidos después de alquilar una moto acuática sin gasolina. El afectado relató que, tras adquirir el servicio, se vio obligado a pagar por una experiencia deficiente bajo intimidaciones por parte de los prestadores del servicio.
El turista narró su experiencia y señaló que a pesar de haber contactado a la Policía, la ayuda nunca llegó, dejándolos a él y a su familia a la deriva durante casi una hora en medio del mar. “Con mis hijos todos asustados, nos dejaron a la deriva; hasta casi nos quitan las cosas porque, claramente, es una estrategia para cobrar más por sobretiempo”, denunció el afectado.
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