En invierno o verano, Lewis Herrera vive serias dificultades para estudiar.
Desde que la pandemia apareció, a este joven le toca salir desde vereda La Sardinata, hasta la cabecera municipal de La Paz, en el norte del Cesar, o bajo el sol o amasando barro.
Su recorrido obligatorio entre 20 o 30 minutos, por un camino en pésimo estado, es la única forma que tiene para llegar al parque San Francisco de Asís, en ese lugar estudia, utilizando una tableta prestada y la conexión pública.
«Me desplazó en la bicicleta desde la vereda La Sardinata hasta la plaza porque donde vivo no hay internet y tengo que conectarme a clases virtuales», dijo el joven de 25 años.
Cuando su complicado camino no está acompañado por temperaturas que pueden alcanzar los 40°c y el sol abrasador del Caribe colombiano; la lluvia y el barro ponen su cuota de complicación: «cuando llueve por lo general, como todo es fangoso, es bastante resbaladizo porque la vía de la vereda está muy deteriorada. A veces hay que bajarse de la bicicleta; uno no sabe a qué hora puede llegar por las condiciones en las que está la vía», dijo.
Lewis cursa octavo semestre de Ingeniería Ambiental en la Universidad Popular del Cesar y para él, la virtualidad ha sido un obstáculo por el que no está dispuesto a dejarse vencer. Su carrera asegura, es la única forma directa de trabajar por su futuro y por el de las comunidades que se encuentran en las veredas cercanas a la suya.
«Yo vivo con mi madre y mi padre. Él tiene un taxi. Mi mamá y yo nos ocupamos de las gallinas; recogemos huevos, también tejo mochilas. Siempre con el fin de sostenerme y conseguir todo lo que necesito para mi futuro», destacó Lewis y aseguró que se ve a futuro como una persona que pueda brindar todos sus conocimientos a la sociedad.
Fuente:
RCN Radio
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