El Gobierno de Panamá ha decidido bloquear tres pasos no autorizados en el tapón del Darién, en la frontera con Colombia, como parte de las medidas para controlar el flujo de migrantes que se dirigen hacia Estados Unidos. Según el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), la acción es parte de la campaña “Escudo”, cuyo objetivo es gestionar la migración irregular.
Un comunicado oficial del Senafront, publicado el 3 de julio, detalla que las medidas incluyen el bloqueo de tres pasos no autorizados: dos en las costas pacífica y caribe, y uno en la ruta terrestre que da acceso al sector del Hito de Chucurti. Los migrantes, a menudo explotados por grupos que prometen llevarlos a Panamá a cambio de pagos exorbitantes, se enfrentan a peligros como terrenos selváticos y grupos criminales.
Para reforzar estas medidas, se incrementarán los patrullajes e interdicción marítima en las zonas costeras del Pacífico y el Caribe. Las rutas terrestres al sector del Hito de Chucurti estarán bloqueadas con barreras perimetrales para impedir el paso de migrantes. La intención es canalizar la migración irregular a través del paso de Cañas Blancas, que conduce a la comunidad receptora de Bajo Chiquito.
La medida también busca potenciar la seguridad y la asistencia humanitaria, y combatir las actividades delictivas de organizaciones transnacionales que se benefician del tráfico de personas. Estas organizaciones suelen cobrar tarifas ilícitas y cometer otros delitos, exponiendo a los migrantes a numerosos riesgos.
Con la administración del nuevo presidente, José Raúl Mulino, se lanzará una nueva campaña denominada “Darién” para garantizar paz y tranquilidad en la región. Esta medida forma parte de un acuerdo con Estados Unidos, que financiará la repatriación de migrantes a través de un aporte de seis millones de dólares. El secretario de Seguridad Interior de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, y el nuevo canciller panameño, Javier Martínez-Acha, han firmado un convenio para cubrir estos gastos.
En 2023, más de 520.000 migrantes cruzaron la jungla panameña, a pesar de los peligros. Este año, ya han atravesado la selva 200.000 personas, principalmente venezolanos. La repatriación de migrantes desde Panamá comenzará en las próximas semanas, según informó Eric Jacobstein, subsecretario de Estado adjunto para el Hemisferio Occidental de Estados Unidos.
Jacobstein y Luis Miranda, del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, explicaron que la logística del programa de repatriación se determinará según las necesidades y realidades del momento, con el objetivo de implementar el programa tan pronto como sea posible.
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